¿Por qué Gstaad, en Suiza, se convirtió en el destino invernal de las grandes estrellas del cine y la televisión, la nobleza, el jet-set, los millonarios?
Aquí te contamos el comienzo de todo eso.
Unos días
El Gstaad Palace es un hotel con el estilo de un gran castillo. Fue construido en 1913.
Luego de la Segunda Guerra, comenzó a atraer a quienes querían olvidarse de los horrores de esos años. Y podían permitirse pasar unos días en un establecimiento de lujo.
El primer visitante de renombre que tuvo el hotel fue el mariscal Bernard Montgomery.
Además, para los shows nocturnos se contrató a figuras como Ella Fitzgerald, Louis Armstrong y Maurice Chevalier.
Eso, a la vez, atrajo a estrellas de Hollywood: Audrey Hepburn, Elizabeth Taylor, Roger Moore y Julie Andrews, quien expresó que Gstaad era “El último paraíso en un mundo enloquecido”.
También la familia real de Tailandia se instaló en el hotel por un largo tiempo.
Por su lado, el príncipe Rainiero y la princesa Grace de Mónaco adquirieron en esa localidad un chalet en el que pasaban las temporadas de invierno. Esa tradición fue continuada por la princesa Carolina.
Otros destinos
Gstaad es una pequeña población de unos 7000 habitantes y se encuentra a 1500 metros sobre el nivel del mar.
Por su fama, se la equipara con otros destinos turísticos de elite como The Hamptons, cerca de Nueva York; Cinque Terre, en Italia, y Saint-Tropez, en la Costa Azul francesa.
00Gstaad
